LA CONSTRUCCION DE LA “RAZA CHILENA”
el afrancesamiento de la alta sociedad mostraba la intencién de supremacia
con el resto de las clases sociales, y, a su vez, redundaba en el distanciamiento
de elementos caracteristicos de la identidad nacional. Recabarren fue enfatico
en sefialar que las clases populares no tenian nada que celebrar en cien años
de republica, sino mas bien debian entristecerse al ver como la elite gozaba de
la fortuna chilena mientras aumentaba la inequidad entre clases sociales. En
su discurso Ricos y pobres sehalö:
iCelebrar la emancipacion politica del pueblo! Yo considero un sarcasmo esta ex¬
presion. Es quizas una burla irdnica. Es algo asi como cuando nuestros burguesitos
exclaman: El soberano pueblo...! cuando ven a hombres que visten andrajos, pon¬
cho y chupalla. Que se celebre la emancipacion politica de la clase capitalista, que
disfruta de las riquezas nacionales, todo eso esta muy puesto en razón.
Por ultimo, la emigracién extranjera y la raza fue otro problema analizado
por los ensayistas del Centenario. El incremento de mano de obra foranea no
sdlo se vio como una amenaza para los trabajadores nacionales, sino también
como una trasgresiön directa hacia la pureza de la raza chilena. Nicolas Pala¬
cios seialö como una aberraciön admitir extranjeros en Chile, pues ninguna
doctrina sociolögica de ese momento creia en la pluralidad de raza como fac¬
tor de progreso, ya que “la organizaciön social estä fundada en la cooperaciön
voluntaria de sus individuos, y esta sölo es posible cuando sus pasiones, sus
sentimientos, su modo de pensar, etc., su alma es semejante, esto es, cuando
sus individuos pertenecen a un mismo grupo étnico, cuando son de la misma
raza sicoldgica”*®®. En este sentido, para el autor era una necesidad poner coto
a la inmigracion porque el pluralismo étnico estaba directamente asociado al
atraso nacional.
Tancredo Pinochet también pensaba que la inmigracion hacia peligrar la
raza chilena. Por lo mismo, present6 una critica a las politicas de gobierno in¬
teresadas en difundir y apoyar la colonizaciön extranjera en Chile, ya que se¬
gün el autor este tipo de programa sölo provocaban el quebranto de la unidad
nacional. El autor escribiö: “nosotros debemos acusar como un peligro nacio¬
nal los centros de colonizaciön extranjera de que principia a cubrirse nuestro
pais, y empefiarnos porque los elementos que los componen se pierdan en la
raza chilena para seguir formando siempre un solo grupo nacional”””. Asi, el
extranjero fue presentado como el principal causante de la degeneracién de
la raza y de la pérdida de la identidad nacional, señalando que el inmigrante
cumple “la traicionera labor de precipitar la rendiciön de nuestra patria”*.
Recabarren: Ricos y pobres, 262.
Palacios: Raza chilena, 85-86.
10 Pinochet: La conquista de Chile, 194.
1 Pinochet: ob. cit. 194.